Farmacia Porte de Loire
Es habitual que los edificios más frecuentados en ciudades de diverso tamaño y población son los vinculados al sector sanitario. Además de hospitales, clínicas, ambulatorios o pequeños centros de salud, las farmacias cumplen una gran tarea al servicio de los ciudadanos.
Es importante que todas las farmacias, además de dispensar de forma adecuada los medicamentos y otros productos sanitarios, cuenten con una serie de características relacionadas con la higiene, la seguridad o la accesibilidad. En este sentido es de gran ayuda contar con puertas automáticas en el acceso desde la calle.
Las puertas automáticas en las farmacias hacen que la entrada y la salida del establecimiento sean más fáciles para personas con movilidad reducida que se desplaza en silla de ruedas o con muletas. Además, los accesos inteligentes mejoran la higiene frente a virus y bacterias gracias a que se evita el contacto manual con la puerta.
Uno de los proyectos emblemáticos de Manusa se llevó a cabo en la farmacia Porte de Loire, situada en Tours, una importante ciudad en la región centro de Francia. Allí el distribuidor Axed Portes Automatiques instaló una puerta automática corredera estándar. Se personalizó con un color determinado para lograr una plena integración con el resto de la fachada del establecimiento teniendo en cuenta que es una farmacia que tiene más de 80 años. Además, se incorporó en la hoja una mirilla para permitir la dispensa de medicamentos sin necesidad de abrir la puerta; algo esencial cuando alguna persona desea comprar una medicina y la farmacia está cerrada, como en horario nocturno.
Gracias a esta instalación, además de aumentar la fluidez en el tránsito de personas, se mejoró la eficiencia energética del local evitando que la puerta quede abierta por un descuido y se produzca un cambio brusco de temperatura dentro de la farmacia sobre todo cuando hay temperaturas extremas en invierno o verano.
